Y yo
que soy feliz
viendo tu sonrisa,
y me pierdo en ella
todas las noches
de mi oscura vida…
la miro
y le resulta tan grande
a mi alma
como una isla
pequeña y diminuta,
desierta, en medio
del azul y basto mar
donde yo, y solo yo
baila al son del fuego
bajo las estrellas
emborrachado de deseo
ebrio de amor.
No necesita
más mi corazón,
sobre el cielo
como una galaxia
tu sonrisa,
y con ella yo,
no hay mejor candela
ni mayor honor
que ser de mi isla
el emperador…
que ser de tu sonrisa
el Cronista,
y de la luz que esplende
el narrador…
Ort.
Y gente soñando, gente despertando
Hay gente que nace, gente que muere
Hay gente que odia y gente que quiere
En este mundo hay mucha gente
Pero, pero, pero…
No hay nadie como tu…
No hay nadie como tu mi amor..
Calle 13
Una respuesta a “La Isla”