A aquellos dos lugares arrasados ya por la mano del tiempo, y que resistirán por siempre el peso de la vida sobre nuestros corazones,
Y por encima de todos los lugares que guarda la tierra y en donde hemos tenido la oportunidad de pisar os dedico estos versos a vosotros camaradas; a los que estuvieron siempre , a los que llegaron para quedarse y a aquellos que se fueron para jamás volver…
Ort
Cuando fuimos los mejores
y la vida no se pagaba
en todas las esquinas
mi juventud se suicidaba
Loquillo
.
Unas escaleras viejas que suben y bajan
que bajan que suben, que vienen y van
allí el cielo era de humo y vino
entre nubes verdes, aromas del soñar.
allí, todo licor era clandestino,
y de clandestinas noches disfrutaba
el alma, presta a jugarse y derramar
el aliento de la juventud, en una baraja
de ases y reyes que no sabía marcar
En una esquina de la nostalgia tengo
con sus paredes garabateadas, aquel lugar,
junto a todo lo que mi madre no sabe
y siempre le habré airado de negar.
Pero que os diría a vosotros compañeros
eternos de aquellas noches, camaradas
que el ron añejo de la presta luna
derramabais, entre el infierno crepuscular…
Alzad el vaso en alto!, una vez más!
y desempolvar el pasado para brindar!
Mis ebrios hermanos marineros
de tierras llanas que han surcado cantando
una y otra vez, de una punta a otra
el cielo nocturno de la mancha que es un mar!
Cuando eterno parecía, y no paraba de brillar
bajo una tenue bombilla, en un local,
y en un ático, balcón abierto a las estrellas
de aquellas noches que jamás se olvidarán
Alzad el vaso en alto!, una vez más!
y desempolvar el alma para recordar!
Ort.